Los perfumes son parte de la identidad de una persona y, por tanto, tienen la capacidad de traer a la memoria recuerdos de momentos pasados y también de personas. Por ello elegir el perfume ideal es una tarea personal. Este accesorio olfativo también puede mejorar el estado de ánimo de una persona y subir su autoestima.

Se piensa que los perfumes se originaron en Francia. Sin embargo, varios estudios han encontrado que los mesopotámicos, persas o egipcios fueron los primeros en crear fragancias. Hace 4000 años ya se utilizaban ciertas esencias en ceremonias. Luego se expandieron por el mundo y llegaron a París, en donde se desarrolló la industria. En torno a las fragancias hay ciertas creencias que han permanecido en varias generaciones. A continuación explicamos algunos mitos y verdades alrededor de los perfumes.

1. Los perfumes no caducan y se pueden conservar por varios años

Mito. Los perfumes tienen un tiempo de duración determinado y se encuentra en las cajas y envases de los mismos. Las personas pueden identificarlos con un símbolo de un frasco de crema y con un número acompañado de la letra M (3M, 6M, 12M, 24M, 36M). Esto se refiere a los meses de duración, explica Natalia Peña, cosmetóloga de Oriflame. Cuando se utiliza un perfume caducado generalmente sus propiedades no son las mismas que tenía en un inicio. Así, pueden tener menos duración o intensidad en su aroma.

2. Los perfumes se conservan mejor en la oscuridad y en sitios libres de calor.

Verdad. Cuando los perfumes se guardan en oscuridad y en sitios frescos se pueden conservar mejor sus aromas. La luz solar descompone las propiedades químicas de la fragancia y las modifica.

3. Existen fragancias que le sientan mejor a una persona según su PH o tipo de piel.

Verdad. Si el PH de una persona es neutro, el perfume se fijará mejor; pero si el PH es ácido o alcalino, éste tendrá menos duración. De aquí la importancia de mantener una piel hidratada para conservar por más tiempo el aroma de un perfume.

4. Degustar granos de café ayuda en la elección correcta de perfumes al momento de la compra.

Verdad. La especialista asegura que los granos de café tienen el poder de neutralizar el olfato, por lo que al masticarlas permiten poner en cero a este sentido para recibir un nuevo aroma.

5. Mientras más cara es una fragancia, es mejor.

Mito. La calidad de un perfume no depende de su precio, sino de su concentración y del origen de esa fragancia. Existen en el mercado perfumes que tienen el aval de reconocidos perfumistas de París y su precio puede llegar a elevarse, pero así también existen perfumes de excelente calidad, de origen orgánico, que han sido elaborados con ingredientes naturales que pueden ser un poco más económicos, pero esto no disminuye su calidad, duración y permanencia de aroma en el cuerpo.

6. Las fragancias ayudan a mejorar el estado de ánimo.

Verdad. Según Peña, está comprobado que el perfume puede incidir en el estado de ánimo de una persona, además de brindarle seguridad y aumentar su autoestima.

7. Colocar 3 veces al día el perfume para que perdure su aroma.

Mito. Los perfumes deberían ser aplicados una o varias veces al día sobre la piel, dependiendo de su concentración. Por ejemplo, si la concentración es de 1% - 3% o de 3% - 4%, se puede aplicar cada dos horas. Si es de 5% - 15% se puede aplicar entre 4 a 5 horas. Pero un perfume de concentración 20% - 30% se puede aplicar cada 8 horas y nuevamente poco antes de un compromiso social.

Existen partes del cuerpo que hacen más duradero el aroma de un perfume.

Verdad. Para que el perfume perdure más en una mujer, puede colocárselo detrás de las orejas, en las muñecas, en el escote y cuello. Mucho mejor si recién ha salido de la ducha, pues así los poros de la piel estarán abiertos y pueden recibir mejor la fragancia. Si va a usar falda o vestido, también puede usarlo detrás de las rodillas, pues así el perfume se emanará también por esta parte del cuerpo.
En el caso de los hombres, la experta indica que las zonas recomendadas son detrás de las orejas, en los hombros, cuello y en las manos. Esta última parte es clave para los caballeros, ya que su saludo formal es dar la mano y así conseguirán que el perfume se quede plasmado por un momento en la persona a quien saludó, aunque en las circunstancias actuales, debido al distanciamiento social, esta práctica no es posible.
También existen zonas donde el uso de perfume no es recomendable. Por ejemplo, en el cabello, ya que, al contener alcohol y aceite, el perfume puede generar reacciones negativas sobre la cabellera o el cuero cabelludo. De igual forma no se recomienda su uso sobre la ropa ya que por sus ingredientes, podría mancharla.

9. La personalidad puede determinar el tipo de perfume más adecuado.

Verdad. Existe la psicología del perfume, que cuando se aplica a cada persona puede determinar el tipo de aroma que le va mejor, según su personalidad. Las fragancias florales suelen ir mejor con quienes tienen una personalidad muy femenina, suave y tranquila. Las orientales se identifican más con quienes evocan sensualidad. En esta categoría están el ámbar y la vainilla. Los perfumes amaderados son para quienes tienen una personalidad elegante y sofisticada y los aromas frescos para las personas alegres y ligeras con notas cítricas o marinas.