Thierry, seducido por Ecuador

2010-03-28 00:00:00

THIERRY SEBASTIA, SEDUCIDO POR ECUADOREntre el arte, los libros y los vinos; este francés continúa enamorado del Ecuador.Cuando la vida le hace un guiño, Thierry Sebastiu00c3u00a0 sabe interpretarlo. Así fue que en julio de 1992, el destino lo trajo a Quito para realizar una misión diplomática como agregado lingu00c3u00bcístico de la Embajada francesa. Tres años después debía regresar a su país de origen; sin embargo, tras realizar un viaje de mochilero por Sudamérica durante nueve meses, se percató de que esa pequeña ciudad de los Andes, con su gente cálida de brazos abiertos, su clima, su arquitectura y su riqueza cultural habían inundado su corazón. Además, las raíces hispánicas -su padre es de origen catalán y su madre, caribeña- habían despertado como un amanecer luminoso en su interior. Se estaba enamorando de Quito y Quito lo quería retener. Todo vino hacia mí fácilmente y hubiese sido muy atrevido de mi parte rechazarlo. El destino me decía u00c2esto es para ti', confiesa Thierry. Con una visa renovada en París, regresó a la latitud cero, donde se adentró en el mundo de la cultura y el arte. Durante 15 años, fue parte de la librería Librimundi, en la que llegó a la gerencia general en el año 2000. Desde aquella época, profundizó su pasión por el arte, a través de la Galería Art Forum, q ue pertenecía también a la librería, y debido a que era vecino y visitante permanente de la sala de arte La Galería, ubicada frente a la residencia donde vivió siete años, en la calle Juan Rodríguez, que Thierry califica como la más bonita de Quito. Así nació también su valiosa colección de arte ecuatoriano, que según sus palabras refleja extraordinariamente la luz y la esencia de nuestro país. Su casa, en las afueras de la capital, atesora esa pasión por la plástica. Allí habitan sus diversas manifestaciones y conviven réplicas de piezas arqueológicas junto a obras de arte moderno, como un tapiz elaborado con dados que cuelga de una pared. Al finalizar su participación en esta librería, decidió montar la distribuidora de vinos Univitis, en compañía de una amiga suya. Tampoco eso fue una casualidad. No solo porque ama el vino, como todo buen francés, sino porque en su juventud había cursado una universidad de verano en Bordeaux, que es la meca del vino, y allí su tía posee viñedos. Sin embargo, su relación con los libros y el arte nunca terminó. Actualmente, Sebastiu00c3u00a0 ocupa la gerencia general de Librería Española y hace un año, junto a otros dos soñadores, montó la editorial Old Continent Art Books que publica exclusivamente libros de arte. ¿Es una tarea quijotesca dedicarse a la edición y venta de libros en una país como el nuestro? -preguntamos a Thierry-. No concuerda con eso de que los ecuatorianos no leen, además no le asusta el acertijo, al contrario, le gusta asumir retos que implican enamorar y seducir a nuevos lectores. Desde que llegó a Ecuador, con los logros y reveses, el destino le ha sonreído a Thierry Sebastiu00c3u00a0, por eso vive con intensidad el día a día y le devuelve la sonrisa a la vida.

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