La acción se ha vuelto la clave en la carrera de Karen Montero Bravo. La lojana de 33 años participó a mediados del 2021 en la serie estadounidense ganadora de premios Emmy, ‘The Bay’, una producción que se mueve entre el amor, el crimen y la familia.

En la séptima temporada, Karen interpreta a Rebeca, una oficial del comando SWAT (Armas y Tácticas Especiales, en español). Su compañero en el escuadrón es el actor y músico Robby Draco Rosa. Juntos desarticulan una banda de criminales que pone en peligro a los protagonistas de la serie. El papel se une a otros roles en el mismo género que han desafiado a la artista.

Su experiencia de más de una década como bailarina le dio las bases para coreografiar los movimientos que se requieren en este tipo de producciones. Han sido años de cultivar destreza, equilibrio y prolijidad en cada gesto.

A su preparación se suman los estudios de actuación y combate para cine que realizó en el 2019 en Londres. Pero su historia con las cintas de acción se remonta a 2018, cuando se puso en la piel de Débora para la película ecuatoriana 3-03 Rescate.

En la producción, Karen era una policía que iba más allá del deber. Se enfrentaba a casos de violencia intrafamiliar y de abuso. Además de acudir a los llamados de emergencia, se involucraba con las personas vulnerables. Quería protegerlas con ímpetu.

Es algo que la Karen real trasladó al personaje que se vio en pantalla, dice ella. Ese carácter para enfrentar la vida ya se había visto en otras situaciones. En un ‘reality’ de baile nacional, formó parte del jurado y era la bruja malvada del programa, asegura.

Karen Montero espera juntar el baile y la actuación en nuevos proyectos. Foto: Patricio Terán / Familia

“Era temible” por las observaciones que les hacía a los participantes, aunque, en realidad, lo que buscaba era sacar lo mejor de ellos en cada paso.

Así enfrenta Karen su día a día. Dando lo máximo de sí en cada movimiento o actuación. Sabe que cada reto suma. Cuando soñaba ser bailarina, trabajaba duro para conseguirlo. Gracias a ese esfuerzo ha estado en los premios Juventud y en los premios Lo Nuestro montando coreografías para espectáculos de primer nivel.

También ha bailado en videos de Daddy Yankee y Maluma. Eso la acercó más a la actuación. “Los bailarines somos actores que no hablamos”, dice. Por ahora, el baile permanece en su horizonte, pero está consciente de que tiene fecha de caducidad, al menos sobre las tarimas. La razón es que aspira convertirse en madre en unos años y los tours artísticos en los que se encarga de crear y ejecutar coreografías demandan bastante tiempo.

Esa es la diferencia que encuentra con la actuación. Considera que en ese caso sí es posible compaginar la vida familiar con la profesional. Actuar es la continuación de su vida como bailarina. Sueña con el cine. Espera algún día unir ambas pasiones en una película musical. Piensa hacerla con bailarines latinos.

El papel en la serie

Con la serie ‘The Bay’ añadió a su repertorio de conocimientos actorales técnicas de oficial SWAT, manejo de armas y otros protocolos. “Por ser acción, el tema táctico debe ser muy fiel a lo que es en la vida real”, asegura. También aprendió que cada cosa ocurre en su momento. Esperó años que el momento de actuar llegara y así fue.

Las conexiones, el talento y tu momento se conjugan y pasa. Sí, hay mucho trabajo detrás, sostiene, y se ve en su hoja de vida. “Es complicado, pero posible”. Mientras llega mayo, mes en el que los ecuatorianos podremos ver su actuación en la serie a través de Amazon Prime, lee un par de guiones internacionales para dos ‘reboots’ en los que audicionará. Uno es para un personaje más icónico y el otro, para una mujer de acción, nuevamente.

Le gusta más el segundo, pero se prepara para ambos. Habrá que esperar para ver qué resulta. A eso se añade su estudio de inglés para mejorar su acento. Apunta hacia Hollywood. También ocupa su tiempo el trabajo que hace en su escuela de baile Feeling Dance Group. Ocupa su tiempo actual en un álbum visual y este año competirá en EE.UU. y México.

En la parte familiar, afirma ser una persona bastante hogareña, hasta cierto punto, aburrida, un mal plan para una salida nocturna. Prefiere ver una película junto a su esposo, Dwight Gregorich, con quien contrajo matrimonio en diciembre de 2021, y su hijastra.