En vida a Paco Rabanne le dijeron de todo: visionario y adelantado a su tiempo y también loco, excéntrico y extravagante. Lo cierto es que el diseñador, que falleció el pasado 3 de febrero a los 88 años en su residencia de Portstall (en el noroeste de Francia), fue un hombre fiel a sus principios.

Rabanne supo, con astucia y sin atisbo de duda, mantener un marcado estilo propio durante su extensa trayectoria en el mundo de la moda. Basta escuchar su nombre -su marca- para que en la mente se proyecten las imágenes de sus diseños metálicos, sus distintivas carteras y de un perfume que es uno en un millón.

Gracias a este perfume (One Million for Men), uno de los más vendidos, el diseñador ecuatoriano Fausto Altamirano (Baccio Couture) conoció el trabajo de Rabanne. “Fue un ejemplo muy grande para mí. Ya que todas mis prendas prácticamente son hechas como él las fabricaba...con cristales, pintura, metales y joyería”.

Cuenta Altamirano que el diseñador español fue uno de los pioneros en utilizar texturas en las prendas. Y añade: “La gente lo tildaba como loco, pero siempre miraba al futuro”.

Amado y odiado

Aunque en lo último de su trayectoria fue odiado también. Fiel a su estilo ecléctico como era, criticaba a la mayoría de los diseñadores de la última década “porque no daban el 100% de su corazón por las artes o por crear algo nuevo en el mundo de la moda”.

Porque para Rabanne una prenda siempre era más que eso. En su mente, lo práctico quedaba relegado y era sustituido con la idea de dar forma a una auténtica pieza artística. En suma, de crear belleza.

Su trabajo hace evidente que sus estudios de arquitectura en la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París influenciaron su carrera en las pasarelas. O quizás fue la inspiración de Cristóbal Balenciaga, a quien han catalogado como escultor o arquitecto de la moda. La madre de Rabanne ejerció como costurera jefa del taller de Balenciaga.

Esa forma que tuvo de implementar conocimientos arquitectónicos en el ámbito de la moda es lo que más le llamó la atención a la diseñadora María Gracia Robles. Ella conoció sobre Rabanne en su época académica.

Moderno para su tiempo

Esta fue una de las principales enseñanzas que le quedó, que el ser humano puede desarrollarse en varias áreas y no encasillarse. “Cuando se trata de vocación, de arte y de gusto la creatividad simplemente fluye”, asegura.

Tanto Altamirano como Robles coinciden en que Rabanne fue muy moderno en su tiempo. La diseñadora destaca su intervención en ‘Barbarella’, la famosa película de finales de los 60. El español estuvo a cargo de los trajes que lució Jane Fonda, quien encarnaba a la protagonista del filme.

Dice Altamirano que lo más distintivo del español es su primera colección todo metal (que le valió que Coco Chanel lo llamara el “metalúrgico de la moda”). Se trataba de piezas hechas con lata platinada y, en algunos casos, bañadas en oro.

Él diseñaba pensando en el futuro, según el creador de Baccio Couture. Esos materiales fuera de los esquemas que utilizó son la base de lo que se emplea ahora, como cristales, cadenas, entre otros.

Su legado, destaca Robles, son esas piezas que se volvieron icónicas y que se siguen viendo (el top tejido, la cartera metálica) reinterpretadas por otras marcas que se inspiraron en Paco Rabanne.

Momentos icónicos

En un episodio de 'Emily en París', Lilly Collins la actriz que encarna la protagonista lució un vestido diseñado por Rabanne. Foto: Redes sociales de Paco Rabanne

Metal. En 1966 lanza su Colección Manifiesto, compuesta por vestidos “imposibles de llevar”, confeccionados con materiales inusuales en el mundo de la moda, como el aluminio, el acero y el plástico.

Salvador Dalí. El famoso pintor surrealista posa junto a sus musas, vestidas con trajes de estilo futurista diseñados por Paco Rabanne. El artista apodó al diseñador como el “segundo genio español más grande”.

Filme. Jane Fonda, que interpreta a la protagonista de ‘Barbarella’, con uno de los vestidos ajustados y tipo armadura que creó Rabanne especialmente para la película de ciencia ficción de Roger Vadim.

Cartera. Otra de las piezas icónicas del español y que ha sido versionada por otros diseñadores que le siguieron. La mítica cartera metalizada, la original es la Iconic 1969, es la favorita de las famosas.

Vigente. La protagonista de la serie ‘Emily en París’ lució un vestido con gradiente del diseñador en un episodio de la tercera temporada. La actriz también usó un Rabanne para la portada de una revista.

Cultura pop. En un reciente concierto en Londres, a inicios de 2023, la cantante Taylor Swift apareció sobre el escenario con uno de los vestidos más icónicos del diseñador y que sigue siendo tendencia.

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