El estilo de vida es clave para tratar el Síndrome de Cushing

Esta enfermedad se produce por el exceso de cortisol en el organismo y causa complicaciones a futuro.
El cortisol puede causar sensación de angustia constante.

El cortisol puede causar sensación de angustia constante.

14 de enero de 2021 17:40
Gabriela Castellanos

El cortisol se produce en las glándulas suprarrenales y se conoce como la hormona del estrés. Esta sustancia cumple funciones importantes en el organismo como el metabolismo de los carbohidratos, grasas y proteínas.

También incrementa el nivel de glucosa en la sangre cuando es necesario y en ciertos casos puede suprimir la acción del sistema inmunitario.

Cuando existe exceso de cortisol en el cuerpo se produce un desbalance. Si el organismo está expuesto durante mucho tiempo a altos niveles de esta hormona se puede desarrollar Síndrome de Cushing.

Según la Clínica Mayo, el exceso de cortisol provoca algunos síntomas que se consideran distintivos para diagnosticar la enfermedad. Puede aparecer una joroba de grasa entre los hombros, el rostro puede adoptar una forma redonda y también pueden aparecer estrías color rosa o púrpura en la piel.

Hay otros efectos como hipertensión, pérdida de masa ósea y diabetes tipo 2

Causas

enfermedad en las glándulas suprarrenales o a un tumor, generalmente benigno.
El uso de corticoesteroides puede generar un desbalance en el cortisol.
Otra causa puede ser un tumor benigno en la pituitaria, donde se estimula a las suprarrenales.

Mejora

La recuperación de la enfermedad toma tiempo. Una vez que se ha dado el tratamiento para equilibrar los niveles de cortisol en el cuerpo se debe manejar un estilo de vida saludable. El primer paso es no apurarse en retomar la actividad física. Los músculos y huesos necesitan tiempo para recuperarse.

Otra clave es alimentarse adecuadamente. No solo ayudará a bajar el peso que se ganó por la enfermedad, sino a darle al organismo los nutrientes que necesita para fortalecerse. La salud mental también debe ser supervisada y acudir a un terapeuta.

Tratamiento

Puede incluir cirugía para remover los tumores benignos en la glándula pituitaria o en las glándulas suprarrenales.

En otros casos se utilizan medicamentos e incluso radioterapia.

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