La chía es uno de los alimentos que ha ganado más popularidad en los últimos años. Hoy en día es uno de los acompañantes preferidos en cereales, panes, bebidas, barras y ensaladas de quienes prefieren los alimentos más naturales y saludables. 

Varios estudios han indagado sobre las propiedades de estas semillas para la salud con el fin de responder si efectivamente son tan nutritivas como prometen. Los científicos han concluido que, en efecto, son bombas nutricionales.

Según un artículo de la revista WebMD, dos cucharadas de semillas de chía contienen 138 calorías, 10 gramos de fibra, 9 gramos de grasas y 5 gramos de proteína. Pero no es todo. También aportan con el 17% del calcio que se necesita en el día, 12% de hierro y 13% de magnesio.

Una de las ventajas es que este alimento y razón por la que muchas personas no tienen problema en incorporarlas a sus comidas es que su sabor es muy ligero y casi completamente imperceptible, por lo que se puede agregar a platos dulces y salados sin problema. 

"Comer semilas de chía es tal vez la forma más fácil de obtener ácidos grasos omega-3, importantes para la salud cerebral", dice la publicación. Una onza de este ingrediente aporta 5 gramos de este nutriente esencial. 

Estudios en seres humanos y animales mostraron que el omega-3 tiene un efecto beneficioso en la salud cardiovascular, disminuye el colesterol, regula el ritmo cardíaco y la presión arterial, evita los coágulos y disminuye la inflamación. 

Por otro lado, la fibra soluble ayuda a disminuir los niveles de colesterol LDL y disminuir el ritmo de la digestión para evitar picos en los niveles de azúcar. Así también se promueve una sensación de llenura.