Los beneficios de la mantequilla de maní
Los beneficios de la mantequilla de maní
El consumo de mantequillas de frutos secos ha ido ganando terreno en el Ecuador. En el mercado local podemos encontrar distintos tipos de esta crema como la de maní, almendras, anacardo o macadamia.
La nutrióloga Alegría Dávalos señala que su consumo es cada vez más habitual, sacando provecho de la grasa buena que aportan estos alimentos.
En el caso de la mantequilla de maní, los beneficios de consumirla son múltiples debido a que regula el azúcar en la sangre, mantiene la salud muscular y cardiovascular y mejora el bienestar del sistema inmune, según afirma Édgar Barrionuevo, nutricionista de la clínica española Silvia Giralt.
El especialista explica que lo primero que se debe tener en cuenta antes de empezar a consumir mantequilla de maní es escoger una que sea 100% pura, sin conservantes, sales o azúcares añadidos.
El nutriólogo Esteban Oñate coincide con ello y agrega que es necesario observar el etiquetado del producto y verificar que la totalidad de la composición corresponda a mantequilla de maní, ya que en algunos casos puede estar mezclada con margarina u otros ingredientes.
De esa manera, lograremos mantener las propiedades naturales del maní. Una de ellas es que tiene un alto contenido de fibra que ayuda a desarrollar las digestiones correctamente y evitar una sensación de pesadez, sostiene Barrionuevo.
La mantequilla de maní también contribuye a bajar de peso debido a que es un alimento con un gran poder saciante que ayuda a combatir la ansiedad por comer entre horas y evita de esa manera la ingesta de otros ‘snacks’ que pueden ser menos saludables.
¡Ojo con la porción!
En este punto, Dávalos aclara que al tratarse de un alimento altamente calórico es preferible comerlo con moderación y recomienda no exceder una cucharada diaria. Esa porción contiene aproximadamente 15 gramos, lo que aporta cerca de 100 calorías. “Las calorías no son sinónimo de algo malo, sino que depende quién lo está consumiendo”, menciona la nutricionista.
Por ejemplo, si se trata de un deportista, un adolescente que está en crecimiento y requiere ganar peso o una persona que tiene mucho desgaste físico en su trabajo o en su entrenamiento, en poca cantidad, la mantequilla de maní aporta muchas calorías necesarias. En personas que cuidan las calorías, el consumo debe ser de una cucharadita, o sea, alrededor de 5 gramos.
Oñate agrega que la ingesta también es recomendada para quienes necesitan subir de peso y, a la vez, tener una mayor ganancia muscular.
Por el contrario, para personas con problemas de dislipidemia (es decir, cuando existen niveles no saludables de uno o más tipos de lípidos -grasas- en la sangre), lo mejor es evitar este producto.
Otro de los beneficios de la mantequilla de maní que menciona el nutriólogo español Édgar Barrionuevo es que aporta un extra de energía debido a que es rica en proteínas y grasas saludables monoinsaturadas.
“Es ideal ingerirla antes o después de entrenar para devolver al cuerpo la energía perdida durante la práctica de ejercicio”, recomienda el especialista.
El experto recalca que el consumo del fruto seco o como mantequilla de maní debe ser moderado, ya que “por cada 100 gramos, su nutriente más alto es la grasa, con un 76%, seguido de un 17% de proteínas y un 7% de carbohidratos”. F
Vitaminas y minerales en el maní
La vitamina E está presente en la grasa de productos como el maní. Es importante para la piel como un antioxidante que permite que las células no sufran el daño de todo lo que nos rodea como los rayos UV y la contaminación.
El magnesio también está presente en este fruto seco y es importante para más de 300 procesos que realiza el cuerpo, entre ellos, regular la función de los músculos, el sistema nervioso y los niveles de azúcar en la sangre.
El maní es rico en 30 nutrientes esenciales para el ser humano y es una buena fuente de niacina, folato, fibra, fósforo, coenzima Q10, resveratrol, grasas saludables y de proteínas. Las grasas que contiene son monoinsaturadas.
Este fruto seco tiene una gran cantidad de omega 6, que son ácidos grasos que se encuentran en todas partes del cuerpo y ayudan con la función de todas las células. Su consumo en exceso puede resultar perjudicial para la salud.
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