Después de pasar algunos meses en casa es normal que el estrés y la ansiedad afecten a las personas y a sus relaciones familiares. Los conflictos y las peleas pueden empezar a surgir, incluso por razones que normalmente no causarían conflicto.

Una de las principales recomendaciones para mejorar la convivencia es trabajar en la comunicación. Según la psicóloga clínica Magdalena Flores, es importante que se genere un espacio seguro en el que padres e hijos puedan compartir sus emociones y sentimientos sin temor a sentirse juzgados. En este espacio se debe hablar desde las preocupaciones que se tienen a actitudes o gestos que hayan causado alguna molestia. “Es importante no solo hablar sino también escuchar y procesar la información. Si es algo que podemos cambiar para mejorar la situación en casa pues es algo que deberíamos tratar de hacer”, indica.

La segunda recomendación es respetar el tiempo y espacio de los demás. Es necesario cuidar la privacidad de cada uno de los individuos de la familia. Esto implica los espacios físicos y emocionales. “Si una persona está buscando tiempo a solas, tal vez necesita procesar algo que le está sucediendo lo correcto no es presionar. Es importante que sepa que cuenta con su familia, pero hay que darle espacio para que pueda asimilar y atravesar la situación”, dice Flores. Evidentemente tampoco hay que husmear entre sus pertenencias.

Una tercera sugerencia es mantener el orden. Esta buena práctica también ayuda a evitar conflictos en el hogar. Es importante que cada persona se haga responsable de sus pertenencias y las mantenga en su lugar. De esta forma se evitará perturbar al resto de personas que viven en casa.

El cuarto paso es generar tiempo en familia de calidad. “No podemos esperar pasar todo el tiempo juntos, cada uno necesitará su momento a solas”, explica la psicóloga. Sin embargo, es importante que en ciertos momentos se realicen actividades para fomentar el vínculo y la unión familiar. Los juegos de mesa o las noches de películas son ideales para conversar y compartir juntos.

Finalmente es importante distribir las responsabilidades y tareas del hogar entre todos. “Una de las razones por las que hay más peleas es porque unos hacen más que otros y eso genera malestar”, dice Flores.