LA FAMILIA AYUDA A DISMINUIR LA SOLEDAD DE LOS PADRESLa vulnerabilidad de los adultos mayores debe ser atendida por los hijos, en cuanto a su salud física y emocional.Tal vez nuestros padres siempre fueron esos seres superpoderosos que nos protegieron en los momentos de mayor fragilidad. Ellos, que siempre nos daban soluciones para todo problema, por mínimo que fuera, llegan a una etapa en que se convierten en seres completamente vulnerables en su salud física y emocional.Ney Dolberg es un médico internista que ha trabajado por más de 20 años con jubilados. En su experiencia, ha constatado que lo que más debilita a una persona mayor es la sensación de soledad. Por ello, tienen la necesidad de vivir en una red social y lo compara con una telaraña que siempre está apoyada en alguna base, en un árbol o una pared, pero jamás está suspendida en el aire.El envejecimiento está acompañado de pérdidas, no solo en cuanto a la muerte de seres queridos, amigos y hasta mascotas, sino también a la disminución de sentidos como la visión y el oído. A esto se agrega la sensación de ser más dependientes de otras personas, como sus hijos o enfermeros.Basta un ejemplo: pensemos que más o menos durante sesenta años estuvieron acostumbrados a manejar un auto, a desplazarse en sus horarios y visitar a sus amigos. Progresivamente, la edad puede hacer que pierdan su licencia de conducir debido a que ya no son 'aptos' para esa actividad.Poco a poco, se van volviendo más dependientes y no porque lo quieran sino porque no tienen otra opción. Muchos, para evitar esa sensación, se vuelven más retraídos y pierden su vida social. Como resultado, la soledad está más presente que nunca.Es entonces cuando los hijos deben tomar la posta y prestar ayuda. Más allá de colaborar financieramente, deben hacerlo presencialmente y en armonía entre hermanos, en caso de que los tengan, o con su familia.Dolberg explica que los adultos mayores pueden incrementar su dependencia en cuatro sentidos: físico, económico, ético y psicológico.Sus cuerpos están desgastados y están en una decadencia mucho más veloz que en años pasados. Es inevitable que no presenten problemas de salud o alguna patología que requiera de atención médica permanente y de controles en el hogar.En la dependencia financiera, existen casos diferentes. Hay adultos mayores que ahorraron y que no necesiten de asistencia económica; pero hay otras personas que no lograron lo mismo y que ahora -con suerte- dependen de la buena voluntad de sus hijos.Para el experto, la dependencia ética tiene que ver con aquello en lo que se cree: Dios, una vida luego de esta o hasta una postura política. Es necesario que los adultos mayores tengan una creencia básica. Muchos se refugian en ella como una manera de avanzar en el último tramo de la vida.El apoyo psicológico es quizá el más importante y en el que los hijos más pueden aportar. Pero hay que ser realistas y estar conscientes de que esta es una época en que las obligaciones laborales ocupan la mayoría de nuestro tiempo. Ya no vivimos en un era en que estar en casa es normal. Ahora, para muchos, la vivienda es tan solo el lugar físico donde se llega a dormir de lunes a viernes y en donde se descansa los fines de semana.Muchas personas han optado que sus padres se muden a su casa para acortar distancias y que sea más fácil ayudarlos. Para Dolberg, esto es recomendable cuando el adulto mayor ya no puede satisfacer por sí mismo sus necesidades básicas -comer, ir al baño- y cuando corre riesgos de enfermar o morir. Pero también, si una mudanza va ayudar a aminorar el sentimiento de soledad, es una decisión que se debe tomar, ya que según Dolberg, ese sentimiento es la causa básica de la muerte.Si hay la opción de vivir juntos, es indispensable que se haga a través de acuerdos. Muchos adultos mayores no quieren salir de su casa, así que ellos deben ser los primeros que aprueben esa decisión. También es muy importante que haya predisposición por parte de la familia del hijo que lo va a recibir.Si no hay tiempo o espacio, Dolberg no descarta la posibilidad de un hogar de ancianos. Allí, además de estar cuidados por profesionales de la salud, pueden compartir con personas de su edad y con sus mismos intereses.Cualquiera que sea la decisión, se debe cumplir con el deber moral de cuidar y honrar a nuestros padres.ALGUNOS CONSEJOS PARA EL CUIDADO DE LOS ADULTOS MAYORESLas llamadas?telefónicas son más fáciles de lo que se piensa. Por más ocupados, podemos encontrar el tiempo.Enseñarles?a utilizar tecnología puede ayudarlos a conectarse con familiares que estén en otros países.Las redes?sociales también son una opción para que se pongan al día y que puedan compartir sus pensamientos.Las visitas?deben ser la primera opción. Se debe tratar de hacerlas entre semana y buscar actividades recreacionales.Reintroducirlos?a un grupo de amigos los hará disfrutar más de su día a día, pues se sentirán identificados.