LO DIGITAL SE TOMA EL HOGAR No es preciso que un electrodoméstico cumpla su vida útil, ahora mandan los desarrollos.Por Jeeyla BenítezLa vida útil de los electrodomésticos en los hogares se ha acortado. Hace tres décadas los usuarios cambiaban sus equipos cada 20 años, ahora lo hacen cada seis.

En los años ochenta, para colocar la ropa en la lavadora una persona debía pensarlo dos veces. La pelusa de las prendas no se recogía y salían, en ciertos casos, con muchas lanas que obligaba un lavado adicional. El nivel de secado y centrifugado era mínimo y, sobre ello, la ropa salía maltratada.Leonor Vargas, ama de casa de 55 años, recuerda que en su primera lavadora, que la obtuvo en 1986, entraban pocas prendas de vestir y tenía que repetir el proceso hasta cinco veces para limpiar la indumentaria de sus seis hijos.El agua tenía que ser proporcionada por ella misma, el equipo no contaba con un sistema propio de absorción. La ropa salía llena de pelusas, pero me acomodaba, la sacudía y en ocasiones le daba un nuevo enjuague a mano, recuerda. Esas lavadoras funcionaban con un motor adicional.Esto cambió desde mediados de la década de los 90, cuando fue el 'boom' de las lavadoras digitales. Todo se controla desde el panel, que puede ser con botones o perillas: agua fría o caliente, según las prendas. Basta con conectar a la electricidad y a una llave de agua, y realiza sola el proceso de lavado, centrifugado y exprimido.En medio de esta evolución también aparecieron los equipos de más de 1 metro de alto, que al centrifugar la ropa el sonido se escuchaba, en ciertos casos, hasta en el departamento de al lado, si la vivienda era en condominio.Luego se incorporó la secadora sobre la lavadora y alcanzaban los 2 metros de alto. Esto fue una ayuda porque no siempre teníamos tiempo de tender la ropa en los cordeles y hasta se mojaba cuando no estábamos en casa, recuerda Liseth Aguilar, asesora contable, mientras indica su equipo en su casa, ubicada en el norte de Quito. Una característica atractiva fue el poco espacio que utilizaba.Ahora, los avances tecnológicos de las firmas que elaboran estos equipos lanzaron al mercados secadoras y lavadoras que son dos en uno.Wilson Díaz, supervisor regional de Almacenes La Ganga, explica que estos aparatos domésticos tienen una técnica híbrida, es decir, arrancan con sistemas de lavado y mientras dura este proceso los sistemas internos guardan energía para el secado. Después de un proceso sigue el otro.Hace tres décadas, el promedio de rotación de un electrodoméstico en los hogares era de 20 años, el mismo período para el que fueron fabricados. Actualmente, según estudios de las empresas comercializadoras, los equipos se cambian entre 3 y 10 años. El cambio no se da porque el aparato se dañó sino porque los adelantos tecnológicos así lo requieren, según los usuarios.En las cocinas la evolución es similar. Hace 20 años hervir un litro de agua tomaba hasta seis minutos y ahora son cuatro. Las parrillas son más resistentes, están elaboradas con acero fundido, que da estabilidad a la hora de colocar una olla.Erika Torres, diseñadora de modas, dice que una de las cosas que llamó su atención al adquirir una cocina fue el horno, pues la temperatura se concentra solo en el sitio en el que se cocina un alimento y no en todo el electrodoméstico, como ocurría antes.

MÁS EQUIPOSYa quedaron atrás los Betamax, seguidos por los VHS que duraron cerca de 20 años en el mercado. Los usuarios tenían que alquilar las películas, que ahora son remplazadas por los DVD. En muy pocos sitios se alquila. Proliferó el negocio de venta de estos discos.Otro equipo que ya?no se comercializa es la reproductora de discos de acetato. En la pared superior tenían una tapa y una consola similar a un plato con una aguja que marcaba el inicio e la canción.Las planchas de carbón ahora son unas reliquias. Las mujeres debían calentar este mineral y colocarlo en estos utensilios de metal. El diseño se mantiene, pero el avance tecnológico ha hecho que se pueden secar incluso las prendas húmedas.