JUGOS PARA EL ALMAChispazos de amorEl grado de evolución genética del ser humano ha sido mucho mayor en los últimos milenios que durante los millones de años que precedieron. Pero, ¿realmente estamos mejor? La duda que surge es si esta evolución nos ha traído también un mayor desarrollo espiritual.Los antropólogos afirman que las transformaciones más significativas se han producido en los últimos 2000 años y continúa en modo acelerado. Estos cambios genéticos se atribuyen a la explosión demográfica mundial. Sin embargo, con el paso del tiempo, de generación en generación, nos hemos desarrollado cada vez más en oposición a la ley general de la Naturaleza: la ley del otorgamiento y amor. Y, producto de esta oposición, sufrimos más, aun cuando parecemos estar rodeados de todo lo mejor de la vida.Los Sabios nos explican la importancia de comprender que sólo elevándonos por encima del plano corporal, y evolucionando espiritualmente, alcanzaremos la tan ansiada felicidad.Y el que es más desarrollado que aquel, siente a su egoísmo como algo realmente aborrecible, hasta el punto, que no puede tolerarlo más dentro de sí, y lo rechaza completamente, de acuerdo a la medida detectada, hasta que no quiere ni puede disfrutar de lo que hacen para él los demás. Y entonces comienzan a surgir en él los chispazos de amor hacia el prójimo, llamado altruismo, que es el atributo del bien general.Yehuda Leib HaLevi Ashlag