LES INVITAMOS A COTORREARHablando de cuenteros... Quizás el más conocido en el medio sea el famoso cuentero de Muisne, hoy preso por sus hazañas. Pero ¿qué es un cuentero? El diccionario de la Real Academia Española establece que es aquel que lleva cuentos, chismes o embustes, sin embargo, la realidad y la experiencia nos lleva a pensar que cuenteros hay muchos y de diversas características, aunque todos ejercitan algo en común: engañar a los ingenuos para alcanzar sus aspiraciones: fama, fortuna, poder... Unos son agresivos, otros en cambio pueden incluso lucir tiernos. Unos venden sueños y su único propósito pudiera ser el que les tomen en cuenta, pero están también aquellos capaces de vender con escrituras la Plaza de la Independencia y, lo que es peor aún, habría quien la compre. Los cuenteros existen porque existen también los ingenuos, esos hombres y mujeres que siguen creyendo en la palabra fácil, conocida también como verborrea, que se alimenta del invento y d el alarido porque se cree que quien más fuerte grita más razón tiene; es un u00c2cuento' de nunca acabar... Quien mucho habla, mucho yerra, es un antiguo y sabio refrán que debieran recordar los fieles a la lengua suelta, larga y hasta viperina. El silencio suele ser elocuente mientras que la palabrería puede convertir al más sabio de los oradores en triste y alevoso cuentero.