viernes 28 de septiembre 2018

De los milenios y señales de humo

Edna Iturralde

En algunos países que se consideran “el primer mundo”, la generación de los “millennials” ha decidido implementar el “matrimonio Beta”, o de prueba, durante dos años y sin compromisos, es decir: la idea de familia no existe. No quieren ataduras que atenten contra su “individualidad”. Como viven ligados a la tecnología y su vida depende de ella cada minuto del día, escogen pareja a través de la Internet. No hay diálogo personal, sino que utilizan el símbolo del pulgar hacia arriba o hacia abajo de acuerdo a lo que a ambos les gusta o disgusta. Esto me hace pensar en las señales de humo que utilizaban los nativos norteamericanos, con la diferencia de que si Toro Sentado hubiera enviado el mensaje: “Te amo Ojos de Ardilla, cásate conmigo”, y ella lo hubiera aceptado, se habrían unido en matrimonio con todas las responsabilidades y, por supuesto, para formar una familia. Lo preocupante es que todo esto conlleve a la desaparición de la familia y, por ende, de la civilización. ¡Esperemos que en este “tercer” mundo los “millennials” conserven su sentido de humanidad por sobre la tecnología!